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Diario del Tour’22: la suerte de Jumbo-Visma comienza a cambiar (Kruijswijk y Roglic, fuera)

El final de la décimo quinta etapa con final en Carcasonne resultó nuevamente endiablado. Se endiabló de la forma más inesperada, en un momento también inesperado, y en tan sólo unos minutos.

Dos ciclistas rodaban escapados en las cercanías de la Côte des Cammazes. El pelotón rodaba con relativa tranquilidad; tenía esa fuga bastante controlada. Era un día canicular. La ola de calor afecta a una extensa zona de toda Europa y la Occitania francesa también se encuentra afectada. De tal magnitud es la cosa, que incluso ASO aceptó incluir medidas excepcionales en los protocolos para la jornada de ayer. Con temperaturas cercanas a los 40 grados centígrados los ciclistas sufrían en un trazado por lo demás nada sencillo. Pero lo malo siempre puede empeorar.

En este contexto sucedió algo que ya había sucedido en una jornada anterior. Y que, a pesar de los esfuerzos que hace la realización de la televisión francesa para que no nos enteremos, siempre acaba trascendiendo a través de las redes sociales. Unas personas cortaban la carretera a pocos segundos de que los dos escapados pasaran por ahí. Estos escapados, frenazo aparte, pudieron continuar su andadura. Lo peor iba a venir segundos más tarde. El pelotón no tuvo la suficiente habilidad para esquivar a los manifestantes, a las motos y a los pilotos de esas motos que bajaron de sus vehículos para expulsar a los manifestantes de la carretera. Todo sucedió muy rápido: caída en la parte delantera del paquete.

Jumbo Visma abría ese pelotón, y Van Aert y Kruijswijk se fueron al suelo. El maillot verde pudo continuar. El neerlandés, sin embargo, abandonaba el Tour de Francia en ambulancia con presumible fractura de clavícula. Ya hemos dicho que lo malo puede empeorar.

© ASO / Charly López

Muy pocos kilómetros más tarde, una nueva caída en el seno del pelotón afectaba al líder Jonas Vingegaard y su doméstico Tiesj Benoot. Afortunadamente Vindegaard pronto empalmó con el pelotón principal. El primer coche del Jumbo Visma se quedaba a atender a su ciclista, y luego protagonizaría escenas de mucho peligro para regresar a su privilegiado lugar dentro de la caravana de este Tour.

A todo esto hay que añadir el hecho de Primoz Roglic no había tomado la salida en la etapa de ayer.

Son cosas difíciles de entender para el aficionado de a pie. Sabemos que Roglic sufrió una caída y su rendimiento no es el acostumbrado. Y que quiere ganar su cuarta Vuelta a España que se inicia el mes que viene. Pero la duda surge: ¿Se puede permitir Jumbo Visma, un equipo que jamás ha ganado un Tour de Francia, esos lujos, cuando está a punto de ganarlo con su ciclista Jonas Vingegaard? Son cosas que no cuadran. Como que Van Aert se meta en una escapada al inicio de una etapa como la de ayer. El maillot verde: un ciclista capaz de combinar momentos excelsos de ciclismo, gran profesionalidad, servicios a su equipo, con otros (o en los mismos) momentos en que no hay aficionado que entienda lo que está haciendo, y que carecen de cualquier fundamento táctico.

La cuestión es que, en esta jornada, a Jumbo Visma se le ha complicado bastante el Tour, con la pérdida de esos dos gregarios de Vingegaard: Roglic y Kruijswijk. Uno por una causa accidental y justificada. La causa de la retirada del esloveno da lugar a muchos interrogantes.

© ASO / Charly López

Aprovechando este río revuelto, y tras sucesivas intentonas, Benjamin Thomas de Cofidis y Alexis Gougeard de B&B Hotels iban a saltar del pelotón. E iban a protagonizar un final excelso. Su ventaja no superó nunca el minuto de ventaja. Pero porfiaron contra el paquete de una manera portentosa. En el pelotón, los sprinters sufrían en las cuestas para no perder comba. Espectacular la escena del ciclista de Intermarché Alexander Kristoff a unos cien metros de una de las cimas para no quedarse. El ritmo del pelotón era endiablado. Pero ni aún así capturaban a los fugados. Incluso Ineos Grenadiers pasaba a cabeza de pelotón ante la posibilidad de viento lateral y abanicos. Con Vingegaard muy atento. Finalmente, primero cedió Gougeard. Sólo a falta de 500 metros de meta fue cuando el pelotón alcanzó a Thomas. Y en el final al sprint, se imponía a Mads Pedersen y a Van Aert el belga de Alpecin Jasper Philipsen.

En resumen. Etapa de mucho desgaste. Y que seguramente tendrá consecuencias, que Jumbo principalmente las puede pagar en los próximos días. Por causas accidentales, sí. Pero por negligencias, pues quizás también.

Escrito por Raúl Ansó

Foto de portada: ASO / Charly López

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