Al hablar de los países nórdicos es imposible que no se nos venga a la cabeza el pueblo vikingo, aquellos hombres que decidieron bajar desde uno de los lugares más fríos del planeta para continuar evolucionando, sin miedo a que eso implicase hacer frente a las civilizaciones más desarrolladas del mundo. Finalmente, acabaron siendo uno de los principales causantes de la caída del Imperio Romano, además de los fundadores de civilizaciones que darían lugar a algunos de los países más importantes de hoy en día.
Algo parecido está sucediendo en el ciclismo actual, un deporte en el que, desde sus inicios, los países del sur y del centro de Europa han mantenido un dominio en el que era muy raro ver corredores bálticos peleándoles la victoria. En toda la historia del Tour de Francia, únicamente un danés había logrado subirse al podio. Algo que en estos últimos dos años ha sucedido en dos ocasiones, con el segundo y primer puesto de Jonas Vingegaard en las ediciones de 2021 y 2022, respectivamente.
Sin embargo, esto únicamente es la punta del gran iceberg que es el ciclismo danés y noruego. Conformado por auténticas estrellas que han ido emergiendo en estos últimos años, como Kasper Asgreen, ganador del Tour de Flandes de 2020, Mads Pedersen, campeón del mundo en ruta en 2019 u otros más veteranos como Boasson Hagen o Alexander Kristoff, que marcaron el inicio de lo que estaba por venir.

Noruega siempre ha dominado en los deportes de invierno. Sin embargo, en estos últimos años ha comenzado a maravillar al mundo en otras disciplinas como el atletismo, con la aparición de los hermanos Ingebrigtsen y el vallista Warhorlm. O el fútbol, con Erling Haaland, un delantero que va camino de marcar una época.
Pero, volviendo al ciclismo, el nivel de corredores que está comenzando a dar este país es realmente sorprendente. No obstante, no se trata de una mera casualidad, ya que llevan potenciando su cantera desde hace años, principalmente a través del equipo Uno X Pro Cycling, una escuadra que nació en 2017 y que está creciendo a pasos agigantados.
Durante la pasada temporada, muchas eran las personas que reclamaban su invitación al Tour de Francia, sin embargo, la organización prefirió incluir al B&B Hotels, decisión en la que tuvo un gran peso la nacionalidad del equipo, francesa en este caso. Aun así, los noruegos continuaron demostrando que eran una escuadra más que digna para entrar en una gran vuelta. De esta forma, realizaron un brillante Critérium Dauphiné en el que consiguieron dos top-10, un décimo puesto en la clasificación general y el maillot blanco, que acreditaba a Tobias Halland Johannsen, ganador del Tour del Porvenir de 2021 (prueba más importante del calendario sub-23) como mejor joven de la carrera.

Por sus filas han pasado otros grandes campeones como Tobias Foss, que al igual que su compatriota se hizo en su día con la general del Tour del Porvenir, en este caso dos años antes. El noruego fue la gran revelación en la prueba contra el reloj de los pasados mundiales celebrados en Wollongong (Australia). Su espectacular actuación, le permitió vencer a los grandes favoritos de la prueba (Ganna, Evenepoel o Pogacar) y subirse a lo más alto del podio.
Sin duda, el maillot arcoíris, que portará durante todas las contrarrelojes individuales del año, le colocará como una de las principales referencias del pelotón durante la próxima temporada.
En definitiva, parece que el ciclismo escandinavo ha llegado para quedarse, si no, tan solo hay que observar quién se proclamó campeón en la prueba en ruta junior del último mundial. Efectivamente, otro vikingo, Per Strand Hagenes.
Escrito por Sergio Quintana
Foto de portada: Fabio Ferrari/LaPresse/RCS Sport