Opinión

El rincón de Laura M. Taberner

La Vuelta de los despropósitos

©Luis Angel Gomez/SprintCyclingAgency

Llega la primera jornada de descanso a la Vuelta, carrera que en poco más de una semana ha dejado multitud de momentos anecdóticos y no tan anecdóticos jornada a jornada.

Desde mi perspectiva, como se vio en televisión y como muchos ciclistas han opinado, con Remco Evenepoel a la cabeza, el aspecto organizativo ha quedado en tela de juicio, especialmente por algunos acontecimientos que se han ido dando en la primera semana. Por ejemplo, no soy capaz de entender por qué los tiempos se toman a dos kilómetros cuando los escapados pueden sufrir los mismos riesgos y a ellos sí se les permite disputar la llegada original. Cosita aquí y cosita allí, se están cargando al final el significado y el sentido de este deporte.

El día de la crono por equipos (demasiado corta para mi gusto) podían haber previsto el horario, que ya era complicado de por sí por comenzar unos equipos con luz en pleno proceso del atardecer. Es obvio que el tema meteorológico no está en sus manos, pero sí se sabía que era muy probable que la lluvia iba a estar presente. Haber adelantado la etapa media hora hubiese sido suficiente, porque los últimos equipos doy fe que no gozaban de visibilidad alguna para completar el recorrido.

En la segunda etapa se encontraron con el chaparrón que les cayó en Mataró. Puede que las inclemencias del tiempo tuviesen sus efectos, pero me dio la sensación que para ser una Vuelta a España había muy poco público en salidas, metas y pasos intermedios. Seguro que con alguna excepción, pero es lo que pude apreciar. No llevo 20 ediciones, pero, si exceptuamos la de 2020 por motivos obvios, las últimas cinco las he seguido muy de cerca. Y es lo que aprecié de esos dos primeros días. He visto más gente en alguna jornada de la Volta Catalunya, que también conozco in situ. O el Giro o el Tour.

Después está el tema de las chinchetas y los intentos de boicot. Pude hablar con Juan Ayuso, Enric Mas y algún otro y había bastante molestia con ese tema. Muchos ciclistas pincharon rueda, que es casi lo de menos, se repara y ya está. El problema viene más en las velocidades a las que ruedan, y que ese pinchazo se puede convertir en un accidente mucho más grave. Es algo que se debe comentar, me pareció un tema bastante grave.

Tema aparte es el tema de las mascarillas por parte de la prensa. Al principio nos tenían un poco apartados en una zona a la que los ciclistas ni siquiera se acercaban, después nos dejaron entrar en el ‘meollo’ pero con la mascarilla puesta. Mientras tanto ves a tanta otra gente de la carrera que no la lleva, o paseándote por allí con los ciclistas entremezclados con la gente y lógicamente sin mascarilla. Es algo que no pude comprender, que no tiene ningún sentido.

Me dio la sensación que la tercera etapa era un pelín demasiado dura. La contrarreloj por equipos fue muy corta y la primera etapa en línea, entre el tiempo y los recortes, tampoco tuvo tiempo el pelotón de adaptarse un poco a la carrera. Cambiar el terreno así de golpe a una jornada dura tan tempranera no me gustó. Hubiese preferido una etapa algo más light. En la cuarta fue difícil ir de salida a meta en coche, el recorrido alternativo facilitado por la organización fue demasiado largo y me costó incluso llegar al final de la etapa. Fue caótico. Nos cruzamos con un coche de Movistar y otro de Alpecin que iban a toda pastilla porque tendrían el mismo problema que nosotros. Después tocaba marcharse a Morella, en Castellón.

El día de Burriana se dio la segunda victoria de Kaden Groves, demostrando que es el sprinter más en forma de la Vuelta. Aún así, creo que no habría que perder de vista a Sebas Molano, del UAE, en próximas llegadas al sprint. Precisamente está siendo una Vuelta que en esta primera semana no ha dejado mucho espacio a los escapados. Los favoritos no quieren dejar nada a la improvisación y han peleado todas las etapas que han podido. Entre ellos, quien lo tiene francamente mal es Evenepoel, porque Jumbo no sólo tiene a Roglič y Vingegaard, de los que no cabe añadir mucho más y que parecen estar a un nivel superior, sino que arriba de la clasificación está el mejor de sus gregarios, Sepp Kuss.

Lo de este chico es espectacular. En lugar de mostrarse cansado o superado, no se le va la sonrisa. Y ahí está, que parece que cada día está mejor. Aún así, Remco no rehúye la batalla, hablé con gente de su staff y está muy concentrado. Tiene mucha seguridad en sí mismo y va a por su segunda Vuelta. También la tienen Lenny Martínez y Cian Uijtdebroeks, que son jovencísimos, debutan en una vuelta de tres semanas y han dado la talla en esta primera semana. Me parece que están respondiendo de forma espectacular. Habrá que verles en segunda y tercera semana, que se les puede atragantar teniendo tan corta edad.

Entre los españoles, me está sorprendiendo gratamente Enric Mas. Está mejor de lo que me pensaba. Y Juan Ayuso, lo mismo. En las subidas tiene una forma de subir algo irregular que parece que no está lo suficientemente fuerte para resistir las embestidas de Evenepoel o Roglič. Pero ya le vimos esprintando por la victoria con Remco y Primoz en el Xorret de Catí, al final ambos saben regularse muy bien. Están ahí, quizá no para ganar la carrera, pero sí para aspirar a una plaza en el podio de Madrid. Aunque difícil lo tienen con estos rivales.

Como punto positivo, viene ahora una segunda semana de grandes emociones y cuyo recorrido me parece muy acertado. Con los ciclistas que están en liza y cómo llega la carrera, la cosa promete. Si no hay más sorpresas, claro. La participación en sí está rindiendo e implicándose. Pero a nivel organizativo la cosa debe mejorar, ya que muchos ciclistas están bastante mosqueados. Esperemos que no afecte a sus futuras participaciones en la Vuelta, a la que todos deseamos lo mejor.

Vuelta España 2023: Primoz Roglič es el favorito nº1

Mi pequeña previa de la 78ª edición de la Vuelta a España

Es un placer estar un año más en la Vuelta con High Cycling. Me parece muy bonito que tanto el inicio como el final sean en dos ciudades tan bonitas y tan importantes como Barcelona y Madrid. También que tanto el primero como el último día sean en territorio español, algo que no sucede todos los años y que cada vez se está perdiendo más en las Grandes Vueltas. Me gusta que el recorrido sea tan para escaladores como es. Será emocionante hasta el final porque hay muchos ciclistas que pueden estar ahí arriba en la disputa de la clasificación general.

Que la organización haya dispuesto un recorrido con tantas etapas de montaña puede añadir un plus a esta edición. Si las fuerzas están igualadas, el hecho que haya etapas de montaña cada semana provoca que esté bastante emocionante, no será una batalla lineal. Así se reparte la resolución de la carrera, no sólo se decidirá al final. Yo creo que así estará emocionante, más que si se decide todo al final.

Me gusta que se toquen los Pirineos y Andorra, que se quedaron fuera el año pasado. También me parece curioso que uno de los puertos pirenaicos por excelencia como el Tourmalet se vaya a ascender en la misma edición en Tour, Tour Femmes y Vuelta, hecho que habría que revisar si se ha dado en alguna otra ocasión en la historia del ciclismo. Personalmente es un puerto que me trae muy buenos recuerdos de cuando estuve en el Tour de Francia de 2019. La llegada a Andorra al tercer día nos dará pistas de cómo están las fuerzas de todos los candidatos a ganar, así que el paso por el Principado se antoja como una parada muy importante en el desenlace final de La Vuelta.

En cuanto a los aspirantes, para mí el favorito es sin lugar a dudas Primoz Roglič, que si hace bueno el pronóstico igualaría el récord de Roberto Heras. Aquí me surgen las dudas sobre cómo afrontará la situación Jumbo Visma, si apostará todo por Rogla o si lo hará por Vingegaard. También dudo cuál de los dos será el plan A y cuál el plan B. Jonas estará para ayudar a Primoz, aunque yo no le descartaría luchando por la victoria, ya que su forma física de 2023 parece muy superior a la de todos los demás. En cuanto a Remco Evenepoel, viene como uno de los grandes favoritos, el dorsal número uno, pero en cambio el recorrido no se adapta tanto a sus condiciones.

Es muy superior en contrarreloj, pero creo que en montaña todavía le falta un punto. Se tendrá que ver durante las tres semanas, el año pasado tampoco pensaba que pudiese estar para ganar la Vuelta y la ganó. En principio creo que la Vuelta estará entre estos tres nombres. Remco debería tomar ventaja en la contrarreloj, pero en la por equipos que abre el primer día me genera dudas que pueda hacerlo.

El UAE viene muy bien equipado, con un buen arsenal. Aunque Juan Ayuso ha tenido algunos percances en las carreras de este año, pienso que estará en su mejor forma en La Vuelta. Vienen con Joao Almeida, que es un valor seguro. Este chico destaca siempre por su regularidad, es un corredor más diésel, no hace grandes ataques, pero siempre está ahí. El apoyo entre ellos será importante, al igual que el papel que pueda desempeñar Marc Soler, un ciclista con gran valor en este momento dentro del equipo.

En el caso del Team Movistar, se presenta un escenario bastante similar al del año pasado, con Enric Mas como líder. Con circunstancias distintas, aunque la temporada del equipo recuerda a la del año pasado, no tengo claro en qué estado de forma se encontrará Enric. Imagino que bien, porque cuando corre en España es un ciclista que da el do de pecho y se encuentra muy motivado. Estoy convencida de que será así esta vez. Tengo también ganas de ver si Oier Lazkano puede despuntar y ganar alguna etapa. Hay ganas de verle. El suceso del cambio en el equipo de última hora que introduce a Erviti por Verona es una lástima. Quizá tenga que ver con su no continuidad el año que viene, no sé. El podio lo tendrán difícil, de todas formas. Los rivales van a ser muy complicados, van a tener mucha más talla que el año pasado.

Entre los ciclistas españoles también está Juanpe López, no hay que olvidarse de él. El maillot de la montaña podría ser un objetivo interesante para él.

Estoy muy contenta con el regreso de Caja Rural a la Vuelta. Ciclistas como Fernando Barceló u Orluis Aular pueden funcionar muy bien en las escapadas. Los del Burgos BH tienen a gente como Díaz Gallego, a Bol y otros que pelearán duro por ser protagonismo. Me sabe mal la ausencia de Euskaltel, ya que tienen ciclistas en sus filas que son muy queridos por la afición como Luis Ángel Maté, Bizkarra, etc. Ciclistas que tenían mucho peso en las escapadas, como Soto, Azparren… También Ibai Azurmendi, que además ser un ciclista muy cercano y peleón en carrera, colabora con nosotros. Es una pequeña espinita que se nos queda. ¡Volverás pronto, titán!

La presencia de Egan Bernal también es destacable. A ver si ha mejorado desde principio de temporada, a ver cómo es su estado de forma. Es un corredor muy importante. Mikel Landa estará también, aunque parece que la responsabilidad será más para Santi Buitrago. Tengo ganas de ver a Kobe Goossens, de Intermarché, que puede dar la sorpresa en alguna etapa. También a Hugo Page, en su equipo, que en los sprints tendrá cosas que decir. Se tendrá que ver las caras con Molano.

Otro ciclista que tengo ganas de ver es Nico Denz, el alemán que venció dos etapas en el Giro para Bora Hansgrohe. Y a Sylvain Moniquet, del Lotto Dstny.

Giro 2023: de las mil polémicas a la victoria de Joao Almeida en el Bondone

Análisis de la 2ª semana del Giro: de un Gran San Bernardo que no fue, de Hansen, Vaughters, Armstrong, Pinot y un Covid19 que hace estragos. 

Mucho está dando que hablar este Giro de Italia 106 y poco o nada tiene que ver con lo que se esperaba cuando arrancó hace ya dos semanas en la región de Pescara. Puede resultar “decepcionante” para muchos como he ido leyendo y oyendo en estos últimos días por las redes, pero yo siempre prefiero ver el vaso medio lleno y remarcar que, si lo analizamos desde la parte positiva, para bien o para mal, está siendo una competición llena de sorpresas. Que quizás no son sorpresas desde la parte estrictamente deportiva y son por otros temas paralelos a la competición, bien puede ser, pero al fin y al cabo, todo ello son factores a tener en cuenta que, de una forma y otra, condicionan la competencia. Y es que siempre se ha sabido que el ciclismo es algo más que dar pedales y que juegan un papel muy importante infinidad de factores que lo envuelven. 

Tras el arranque de la “Corsa Rosa” y volver a España desde el país de Dante Alighieri, una “Divina Comedia” estaba por empezar. Si bien en un principio se evidenciaba la superioridad del belga Remco Evenepoel y se posicionaba como máximo aspirante a lograr el triunfo final de la competición, pronto cedía el liderazgo con un poco de alivio ante el joven ciclista del Team DSM, Leknessund, quien durante las siguientes cinco etapas mantuvo la maglia rosa. Fueron en esas primeras etapas donde vimos varias llegadas al sprint o del grupo escapado con victorias conseguidas por ciclistas potentes y rodadores, entiéndase Michael Mathews, Kaden Groves, Mads Pedersen, Paret-Peintre, Bais o Healey.

Y tras estas llegó la segunda crono donde nuevamente Remco se impuso, pero con escasa ventaja, a Geraint Thomas y a Primoz Roglic. Eso ya fue señal de que algo no andaba del todo bien en las filas del Soudal Quick Step y esa misma jornada, unas horas más tarde, se daba la noticia del abandono de la carrera del campeón del mundo y de varios de los integrantes del equipo, a causa del Covid19, quedando el equipo inicial reducido a tres corredores: Davide Ballerini, quien justo hoy también decía adiós a la carrera y a quien ya se le vio tosiendo fuerte el sábado (de hecho pensaba que no saldría en la jornada del domingo al verle en tan mal estado el sábado, pero quizás la ilusión por correr en la etapa del domingo que pasaba por su casa le mantuvo en competición), Pieter Serry e Ilan van Wilder, y tan solo nueve personas del staff.

El resto, a casa. No sabemos si el traslado en helicóptero tuvo algo que ver en este asunto tras la etapa del Gran Sasso, pero todos los integrantes que subieron a ese helicóptero días después fueron baja por enfermedad. No sé si fue cosa de que les echaron un mal de ojo o casualidad. En cualquier caso la situación parecía casi una broma. 

A raíz de estos hechos la organización decidió volver a exigir el uso de las mascarillas para evitar males mayores y que los deportistas se infectaran. Sin embargo, las bajas durante la segunda semana por enfermedad fueron significativas y muchos ciclistas dijeron adiós a la competición antes de llegar al segundo día de descanso: Mads Pedersen, Stefan Küng, Alessandro Covi, Samuele Batistella … así hasta llegar a las 40 bajas aproximadamente. 

Y entrando ya en la segunda semana la clasificación general de la corsa cambiaba de líder y el veterano galés del conjunto Ineos, Geraint Thomas, pillaba el relevo del belga y la carrera tomaba una dinámica más bien aburrida y sin demasiada emoción, donde los aspirantes no daban la cara y se mostraban “reservones” en esfuerzos y las escapadas de cada jornada iban llegando a meta para hacerse con la victoria parcial sin demasiados apuros. Y en esas etapas vimos llevarse la victoria al carismático rubio del bigote Magnus Cort, al sprinter alemán del UAE Team Emirates Pascal Ackermann y hacer doblete a Nico Denz del Bora Hansgrohe.

Y entremedias llegó la polémica con el recorte del recorrido de la etapa de Crans Montana que dio mucho de que hablar y se intercambiaron opiniones diversas a través de las redes sociales como Twitter. Al parecer la previsión del tiempo anunciaba un temporal que después fue menor pero las opciones para velar por la seguridad de los ciclistas se tomaron el día antes de la misma. Según se comentó, los ciclistas propusieron hacer todo el recorrido sin ascender al Gran San Bernardo, bordeando el segundo puerto, y continuar con el recorrido primeramente establecido, pero la organización no estuvo de acuerdo y se recortó el recorrido total y la primera ascensión reduciéndolo a 76 kms y una ascensión.

Todo este tema se abordó aquí en High Cycling con la opinión de Jorge Matesanz. Adam Hansen, el representante de los ciclistas mantuvo un intercambio de pareceres en referencia a este tema. El primero haciendo hincapié en buscar el atractivo para patrocinadores y aficionados y el otro defendiendo la seguridad de los deportistas por encima de todo. En cualquier caso, considero que ambas posturas son totalmente compatibles. Lo que puedo añadir al respecto es que me ha llegado información de que, aunque los ciclistas propusieron como alternativa, para así modificar lo menos posible el primer recorrido de la etapa, hacer todo el recorrido bordeando el segundo puerto pasando por una carretera distinta por las faldas de la montaña la organización declinó esa propuesta y decidió hacer el recorrido simplemente reducido en kilómetros modificando el punto de salida y quitando totalmente la primera parte de la etapa.

Todo ello fue a causa de que la policía suiza no dio el permiso para modificar el trayecto y añadir una vía o carretera distinta a lo que tenían prevista en un principio y a la organización no le quedó más remedio que simplemente acortar el recorrido de esa manera sin modificar las carreteras de paso. Al final dudo que a la misma organización le interese perder el atractivo de la competición de cara al espectador, pero tampoco hay que hacerlo a costa de la seguridad del deportista cuando las condiciones meteorológicas pueden ponerles en peligro, claro está. 

Mención aparte para otra de las polémicas que surgieron durante la segunda semana: la protagonizada por Thibaut Pinot, Vaughters, mánager general del equipo Education First, y el archiconocido ex ciclista americano Lance Armstrong. Todo esto surgió con las declaraciones de Pinot tras quedar segundo en la etapa ganada por el ciclista del Movistar Einer Rubio, donde el francés confesó que prefería que ganase el ciclista del equipo español al que les acompañó en la escapada, el ciclista del Education First, Jefferson Cepeda.

Ante estas declaraciones, en la etapa del domingo donde Ben Healey, ciclista del Education First quedó segundo y felicitó al vencedor Brandon McNulty, Vaughters alabó la actitud de su ciclista y lo comparó con el mal perder de Thibaut con las declaraciones que este había hecho dos días atrás. El francés mostró sus preferencias por Einer, pero tampoco había necesidad de hacerlo y la reacción del mánager general del Education First tampoco fue necesaria. Este intercambio de palabras en redes sociales creó polémica y expectación y tras la respuesta del francés con una pregunta retórica dirigida a Vaughters, obtuvo respuesta a la misma por parte del ex ciclista americano Lance Armstrong, quien con una serie de palabras poco respetuosas vino a remarcar la hipocresía de Vaughters, saliéndose del tema inicial. Lo que está claro que todavía hay rencillas personales abiertas entre ambos ex ciclistas por asuntos del pasado en los que no voy a entrar. 

Y si hablamos de franceses, el francés que se llevó una grata sorpresa al verse vestido de rosa en la jornada del sábado, fue el compañero de equipo de Pinot, el campeón de Francia de crono, Bruno Armirail. El joven vivió un sueño rosa por dos días y lucía una sonrisa de oreja a oreja que no podía borrar de su cara. Recuerdo que le conocí en 2019 durante la Vuelta a España, su primera Gran Vuelta, donde su equipo, el Groupama FDJ se presentaba con una alineación de ciclistas muy jóvenes e inexpertos en el campo profesional, y me pareció un chico muy humilde y tímido, pero con muchas ganas e ilusión por ser un buen ciclista profesional.

Por ello me alegro de que haya podido disfrutar de liderar la clasificación general de rosa durante un par de jornadas aunque en la etapa de hoy, con la ascensión a Monte Bordone, ha acabado cediendo varios minutos y con ello la maglia rosa, que ha vuelto a las espaldas de Geraint Thomas y donde hemos visto a un Joao Almeida protagonizando un ataque que le ha llevado a descolgar al máximo favorito Primoz Roglic y a llevarse el triunfo de etapa.

Primera prueba del algodón para valorar las fuerzas y el estado de forma de los máximos aspirantes a disputar la maglia rosa en la jornada de hoy y primeras conclusiones sacadas al respecto: Geraint Thomas está en su mejor versión, me aventuraría a decir que muy similar a la versión que vimos en la época en que ganó el Tour de Francia, hace ya algunos años, que Joao es un serio candidato a tener presente para luchar por la primera posición de la clasificación general y que quizás Primoz Roglic no está todo lo bien que en un principio parecía estar. Veremos cómo se desarrollan los próximos días, aunque personalmente me aventuro a manifestar que la cronoescalada del sábado será decisiva en la lucha y consecuente conquista de la maglia rosa en este Giro 106. 

©RCS/LaPresse

Giro 106: Italia se viste de rosa, impresiones desde dentro de la carrera

Con la entrada de la primavera y pasadas las lluvias de Abril, el mes de Mayo se presenta, como cada año, vestido de rosa con motivo de la primera de las Grandes Vueltas del ciclismo profesional masculino: el Giro de Italia, conocido por los “tifosi”  como La Corsa Rosa.

A nivel personal, era la única de las Grandes Vueltas en las que no había tenido el placer de haber podido acudir todavía, aunque paradójicamente siempre ha sido mi competición de tres semanas favorita. Este año, al inaugurarse en territorio italiano peninsular, cosa que hacía varias temporadas que no ocurría, desde High Cycling vimos una buena oportunidad de estar presentes en su arranque evitando los desplazamientos y dificultades logísticas que conllevaba el paso de la carrera por territorios de nacionalidad diversa. Así que, sin dudarlo demasiado, hicimos maletas y nos desplazamos hasta la provincia de Pescara, en la región de los Abruzos, donde la carrera arrancaba con una crono individual en la localidad de Fossacesia Marina con un recorrido de 19,6 km con el mar Adriático como telón de fondo.

Una “Grande Partenza” diferente a la que nos tenían acostumbrados en las últimas temporadas y considero que bastante deslucida comparada con la de años anteriores a nivel estético, ya que no es lo mismo ver una salida con todo el pelotón en marcha de forma conjunta en una gran ciudad a ver una competición con el arranque de una prueba contra el crono individual en una pequeña localidad marítima de pocos habitantes, aunque la prueba de crono sea una fórmula bastante usada por los organizadores de las Grandes Vueltas en reiteradas ocasiones, ya sea con prólogos individuales o por equipos. 

Analizando esta primera experiencia asistiendo a la carrera italiana es difícil no hacer una valoración comparativa con otras carreras o competiciones en las que también hemos podido asistir anteriormente. Si bien es cierto que el Giro de Italia tiene ese encanto que la hace especial y, para aquellos que somos unos románticos del ciclismo, entre los que me incluyo, se proyecta como una competición envuelta en un halo de épica y magia si recordamos las gestas de Pantani o la ascensión a esos colosos montañosos que te dejan sin respiración, he podido captar diferentes aspectos muy positivos y otros a mejorar en líneas generales en este primer viaje relámpago para el comienzo del evento italiano. 

A nivel estético, hay que aplaudir la involucración de la organización, patrocinadores y afición en general, donde se puede ver un despliegue de medios, motivos decorativos por doquier, tanto en el centro de las localidades como en carreteras intermedias, que nos hacen tener presentes en todo momento que la Corsa Rosa es una fiesta grande para el pueblo italiano. El “amore infinito” del pueblo italiano por el ciclismo se desprende y propaga por todos los cinco sentidos. En este aspecto, creo que en España, aún vamos un paso por detrás y tendríamos que poner más atención en estos detalles que son reflejo del cariño y el valor que se le da a la prueba por parte de todos: organizadores y aficionados. 

Por otro lado, me ha parecido muy positivo que, con excepción de la etapa que sale desde territorio suizo y la penúltima en territorio esloveno, la mayor parte del recorrido sea en suelo italiano. Creo que Italia es suficientemente diversa y atractiva como para ofrecer un recorrido variado con opciones para todo tipo de corredores y en esta edición se haya descartado el inicio desde ciudades de territorios extranjeros. 

Un aspecto que considero que deberían mejorar es la gestión organizativa de cara a los medios. Si bien es cierto que al cubrir una competición de varios días, el estar presente los días anteriores al evento es un aspecto clave para entender el funcionamiento organizativo de las pruebas, ya que cada una tiene sus particularidades, y a nosotros desde High Cycling nos fue imposible estar ahí, sí es verdad que noté algunas diferencias respecto a la organización de La Vuelta. Punto a favor de La Vuelta al tener en cuenta y dar espacio y cabida a los diferentes tipos de medios en la zona de prensa del control de firmas.

En La Vuelta hay un espacio reservado para medios digitales, prensa escrita, radio y cadenas de televisión diversas. En el Giro la zona de prensa no estaba delimitada por zonas según tipología de medios y las cadenas de televisión campaban a sus anchas, incluso metiendo codos y poniendo malas caras, por la presencia de personas que, aunque sea para medios más humildes y pequeños, estamos allí para intentar captar cualquier dato o información relevante que pueda ser de interés para después difundirlo, aunque el alcance de audiencia sea menor. Este aspecto lo estuve comentando posteriormente a la salida de la segunda etapa con varios periodistas españoles, como los integrantes del podcast El Maillot, que también se habían desplazado a Italia para el arranque del evento.

Tanto ellos como periodistas españoles de prensa escrita como el diario Marca habían priorizado quedarse en la zona de buses para buscar el contenido con más tranquilidad y sin entrar en agobios y tensión con el medio televisivo internacional. Tomo nota de ello para la próxima ocasión, aunque eso implique, por otro lado, perderse otros momentos y anécdotas que se ven siempre en el control de firmas. Aparte de ello y en la misma línea de temas de gestión, he tenido constancia de que desde la organización este año se ha modificado la compañía o los encargados que trabajan en el tema logístico y de ocupación hotelera y a los mismos equipos les ha llegado dicha información con muy poca antelación, cosa que dificulta su propia gestión logística.  

Entrando ya en competición cabe remarcar el brillante inicio del campeón del mundo, el joven ciclista belga del Soudal Quickstep, Remco Evenepoel. A nivel personal había apostado que la primera “maglia rosa” sería para el italiano Filippo Ganna al correr en casa y mostrar su intención de ganar en la crono los días antes de la carrera. Una crono que, aunque corta, de menos de 20 km y en un terreno llano en unas antiguas vías de tren reconvertidas en un carril bici y con una única ascensión en el último kilómetro del recorrido, fue calificada como “muy, muy dura” por el ciclista del Groupama FDJ, el francés Thibaut Pinot, en línea de meta.

Una grata sorpresa ver al francés este año en la carrera italiana, el año de su despedida como ciclista profesional, cambiando su programa habitual de Grandes Vueltas. Aunque quizás haya venido a la carrera sin esa presión añadida que siempre ha tenido por ser el eterno aspirante a lograr la victoria en el Tour de Francia por la afición francesa, ya ha dado muestras de su calidad y a día de hoy se impone en la clasificación de montaña portando la “maglia azzurra” que lo confirma. 

Justamente sobre Remco estuve hablando con su inseparable jefe de prensa, el británico Phil Lowe, a quien pregunté si veía alguna posibilidad de conservar la “maglia rosa” durante toda la competición a lo que él me comentó que sería muy improbable, que seguro la acabaría “soltando” en los próximos días.

No ha tardado en hacerlo y en la jornada del martes cedía la “maglia” ante el triunfo y la ventaja de tiempo en la clasificación general del joven ciclista del DSM, Andreas Leknessund. Buena jugada la del Soudal Quick Step quienes se quitan el peso y la responsabilidad del liderato, al menos por unas jornadas. Quien de momento se mantiene algo más discreto, como discreta fue su actuación en la crono si la comparamos con la marca registrada por el campeón del mundo, es el esloveno del Jumbo Visma, Primoz Roglič, siempre con una eterna sonrisa en la cara. 

En la segunda y tercera jornada, etapas más pensadas para la llegada al sprint, se imponían los ciclistas Jonathan Milan del Bahrain Victorious y Michael Matthews del Jayco Alula respectivamente. El joven talento italiano Milan, de quien hay rumores de su marcha el año próximo de su actual equipo, estaba en todas las quinielas para hacerse con la victoria en la segunda etapa y no defraudó.

Por otro lado, el ciclista australiano Matthews, del Jayco Alula, se mostraba muy motivado y con ganas de buscar la victoria con unos “emocionantes días por delante” en las declaraciones que hizo en el control de firmas de la segunda etapa. No tardó en conseguirla al día siguiente imponiéndose a otros favoritos como Mads Pedersen o Kaden Groves.

El UAE Team Emirates, de momento ha empezado en su línea,y su líder Almeida se sitúa discretamente tras la estela del belga Evenepoel. Tampoco hay que perder de vista al conjunto alemán Bora Hansgrohe. Su líder Aleksander Vlasov de bien seguro será otro de los aspirantes más fuertes de la competición y, de momento, se mantiene en las primeras posiciones de la clasificación general. Veremos si tomará el relevo en el triunfo final de su compañero de equipo, el australiano que se impuso en la edición pasada, Jai Hindley, quien ha sido el gran ausente en esta edición y al que, en principio, veremos este año en la ronda gala. 

Aunque la carrera acaba de empezar y hay todavía más de dos semanas por delante, al tratarse de una competición tan impredecible, lo que sí está asegurada es la emoción hasta la última jornada. Las conjeturas y predicciones del ganador final ya es tarea más complicada, aunque estos primeros días nos han dado pistas y algunas cartas ya se han puesto sobre la mesa. Quizás tras la segunda jornada de crono, que llegará en la novena etapa, se empezará a ver con más claridad el orden de los aspirantes en la clasificación general y se separará el grano de la paja. Seguiré comentando sobre las siguientes jornadas en los próximos artículos de la columna. Seguid atentos…

Mis visiones sobre el inicio del Giro de Italia 2023

La primera pincelada que me gustaría compartir es la emoción por poder estar in situ en el Giro de Italia por primera vez, que era la Gran Vuelta que me faltaba y algo que a nivel personal me faltaba por hacer. Puede que de las tres sea la que más ilusión me hacía, ya que Italia como país siempre ha sido uno de mis lugares favoritos. Considero que es precioso tanto a nivel cultural como paisajístico, también por la gastronomía, el idioma, la gente… es mágico. La pasión por el ciclismo que se vive en Italia es palpable, se transmite con sólo respirarlo un poco.

Me da la sensación de que el Tour transmite un tono más comercial, y que la Vuelta está algún paso por detrás, aunque en los últimos años se han introducido mejoras y va recuperando terreno y relevancia. Pero el Giro es el Giro.

Si entramos ya a lo que es la edición 106 de esta carrera, me gusta por ser cada vez menos habitual que el Giro de Italia comience y termine en territorio italiano. Creo que es positivo en favor de este Giro 2023 el evitar ese gran traslado desde países como Israel y Hungría que al final era un añadido de cansancio y tensión para los equipos en esa primera semana que esta vez se va a ahorrar. El territorio italiano se basta y se sobra, que da para mucho Italia.

A nivel de equipos, quiero señalar en cuanto a los Pro Conti me parece una buena decisión haber invitado al Team Corractec, que se estrena en la carrera y que hará todo lo posible por dejarse ver en cada etapa. También veo cada vez más consolidado al Eolo Kometa, dando poco a poco pasos hacia delante. Con la victoria de Fortunato en el Zoncolan y la alineación que presentan este año con Albanese y cía, este equipo tendrá seguramente más presencia y relevancia que campañas anteriores. Les veo peleando alguna de las ‘maglias’ con el propio Fortunato. Vamos a verles.

Por la ‘ciclamino’, que al final es decidir cuál es el mejor velocista del Giro, creo que vamos a ver una batalla bastante reñida y disputada. Hay muchos ciclistas muy potentes que pueden dar juego en esta clasificación. Me alegro de la presencia de Mark Cavendish, es un tipo que cae muy bien a la afición y en la presentación se le vio con ganas y motivado. Puede ser uno de los nombres a tener en cuenta en este tipo de etapas.

Lo mismo que Fernando Gaviria, que con el cambio de equipo y el inicio de temporada tan bueno, estará en la pomada. Estuvo en Mallorca preparando el Giro junto a Albert Torres, que también estará en el Giro con Movistar y que probablemente ejerza de lanzador. También José Joaquín Rojas y el alemán Kanter. Al que veo menos es a Pascal Ackermann. A lo mejor sorprende, pero de primeras no apostaría por él.

Magnus Cort Nielsen, del EF, Michael Matthews, del Jayco, y sobre todo Mads Pedersen, del Trek, son tres nombres a tener en cuenta en el sprint. Tengo debilidad por Pedersen desde que ganó el Mundial en Yorkshire. La verdad es que en este pasado año ha dado un salto de calidad importante y le veo con muchas papeletas en esta clasificación. Matthews es cierto que, aunque siempre es un fijo y siempre está, ofrece más dudas.

En cuanto a la maglia azzurra, la de la montaña, hay que tener en cuenta a gente que ya fue importante en la edición pasada como Koen Bouwman o a Lennard Kämna, que es un chico polivalente y con muchas posibilidades y que hasta principios de esta semana anduvo de entrenamientos por Mallorca preparando el Giro. Bauke Mollema sería un nombre interesante y a tener en cuenta para esta clasificación, aunque primero habrá que ver si se mete en esa pelea. Warren Barguil suele ser un habitual de esas luchas, pero creo que han pasado sus mejores años. Para mí, uno de los que estoy segura va a disputar la montaña es el ciclista del UAE, Jay Vine.

Una pena las bajas por Covid. Por ejemplo, la de Gino Mader, o las del Jumbo, que ha sufrido una realineación y restructuración por este motivo. Rohan Dennis, de hecho, subía en redes alguna foto en el escenario de la presentación emparejada con tutús rosas, etc. No sé con qué estado de forma acude a la llamada del equipo, pero al final de un modo o de otro va a ser uno de los hombres clave para ayudar a Primoz en su lucha por la clasificación general.

Para la maglia de mejor joven, creo que Remco es el evidente favorito. Un par de escalones por debajo del belga y de Primoz estará Joao Almeida, que para mí tiene una cualidad muy importante, que es la regularidad. No es tan explosivo ni tan potente como otros, pero a la chita callando, pone su marcheta subiendo los puertos y siempre está. UAE tiene un equipazo con Covi, McNulty, etc. Han mirado muy bien este Giro. Se nota.

Otro ciclista que sigo mucho en redes es a Thymen Arensman, que me cae bastante bien. Ya en DSM el año pasado hizo una muy buena temporada. Creo que es un candidato a tener muy en cuenta. Hablando de su ex equipo, el DSM se ha presentado con un ocho súper joven. Creo que tampoco hay que perderles de vista, van a dar muchas pistas de lo que está por venir.

En la lucha por la maglia rosa, comentar que en un principio va a estar entre los dos grandes, como ya vimos en la Volta a Catalunya, carrera en la que estuvo High Cycling, y que sirvió como previo para este duelo. Sobre esa lucha no creo que pueda pronunciarme porque les veo muy igualados. Pero no hay que descartar a otros aspirantes como pueda ser el mencionado Joao Almeida, o con el Bora (ojito). En 2022 nadie les esperaba y dieron la sorpresa, y Vlasov viene arropado por un equipo bastante potente.

Ojo también con Ineos, no es ningún secreto que traen un equipo muy reforzado. Tienen en sus filas a Filippo Ganna, que es el favorito número uno en el 99% de las apuestas. Estaremos allí y veremos si es capaz de empezar de nuevo el Giro con la maglia rosa. Juega en casa, se le ve muy motivado y habrá preparado la crono con mimo.

Animaros a comentar, a dar vuestra opinión e iremos hablando durante el Giro.

Volta Catalunya 102: la competición escrita con ‘R’ de Roglic y Remco

Son tiempos emocionantes para los amantes del ciclismo que se deleitan con los encuentros directos entre los grandes ciclistas que, a día de hoy, están marcando una época. Batallas protagonizadas por esa clase de ciclistas, líderes de equipo, que parecen estar muy por encima en nivel y prestaciones que el resto del pelotón profesional y que, aparte de ello, no tienen miedo de coger las riendas en primera persona en numerosas situaciones de carrera, de lanzar ataques en solitario o de llevar a cabo épicas hazañas que, poco o nada, tienen que ver con el ciclismo calculado al milímetro que vivimos hace unos años en la época dorada del Team Sky. Ese tiempo en que no se daba pie a la improvisación y lo imprevisto de las carreras se podía ver con cuentagotas; y es que, en lo que llevamos de temporada, ya van unas cuantas ocasiones en las que hemos podido ser testigos de varios encuentros de máximo interés en la lucha por la victoria de competiciones de una semana, monumentos o clásicas, por esos ciclistas tocados con una varita y dotados de esa habilidad fuera de lo común que se ve tan lejana para el resto de los mortales.

Sin duda alguna, esta vez el interés era el primer cara a cara protagonizado por dos de los mejores ciclistas del panorama profesional actual (con permiso de otros grandes ciclistas que estuvieron disputando la competición): el esloveno Primoz Roglič, del todopoderoso Jumbo Visma, y Remco Evenepoel, el vigente campeón del mundo y jovencísimo corredor del Soudal Quickstep, tras el último encuentro protagonizado por ambos corredores allá por agosto del estío pasado en la Vuelta a España 2022 y que acabó con el abandono por una grave caída del primero y el triunfo máximo del segundo en la competición, logrando con ello su primer triunfo en una Gran Vuelta. 

Eran muchos los que hacían conjeturas respecto al estado de forma del esloveno tras su largo período de recuperación por su lesión en La Vuelta 2022 hace unas semanas y veían más que improbable la superioridad de antaño del ciclista del Jumbo Visma, que contrastaba con el ascenso meteórico y la magnífica racha del belga tras su éxito en la Vuelta y su victoria en el Campeonato del Mundo semanas después, cerrando así la temporada anterior con broche de oro e inaugurando el 2023 de la misma manera, con el triunfo de la clasificación general en el UAE Tour. Esas dudas se fueron disipando con el paso de los días durante la semana de la Tirreno Adriático donde el esloveno, además de afeitar el vello de sus piernas, fue preparándose progresivamente para lo que estaba por venir: el cara a cara con Remco Evenepoel en la gran cita previa al Giro de Italia 2023, la Volta a Catalunya 2023. 

© Laura M. Taberner

Si algo hay que destacar de esta edición 102 han sido los grandes momentos que nos han brindado y nos han mantenido  a muchos pegados al televisor o pantallas de dispositivos para seguir de cerca cualquier movimiento de ambos líderes en carrera. No dejaron espacio ni momento para escapadas y dieron la cara desde la primera etapa, disputando cada llegada, desde la primera, en Sant Feliu de Guíxols, a la última frente a Montjuic, en la Ciudad Condal. Fue una grata sorpresa el poder disfrutar de la actitud de ambos corredores, etapa tras etapa, y comprobar que habían acudido a la cita mostrando sus mejores versiones. Algunos días Roglič se mostró superior, en otras ocasiones el belga hizo lo propio. La afición se mostraba dividida y claramente ambos se merecían ganar, por actitud, por esfuerzo y por dar la cara y la talla muy por encima del resto. Finalmente el gato al agua se lo llevó el del Jumbo Visma, Primoz Roglič, dando así un golpe de autoridad sobre la mesa.

Las cartas se han descubierto en esta primera cita de cara al Giro y personalmente creo que las fuerzas estarán muy igualadas en el mes de mayo en Italia. Cada uno con su estilo y su forma de afrontar la carrera, pero ambos con carácter y motivación. 

Aparte de ello, pienso que la Volta ha sido el espacio para tener en cuenta otros factores y datos más allá de Remco y Roglič. Uno, desde mi punto de vista, ha sido la actuación de Joao Almeida, quien sin hacer demasiado ruido durante toda la semana, se consolidó en el tercer puesto de la clasificación general de la prueba. El portugués no protagonizó ningún ataque ni actuación muy destacada, pero supo estar en los lugares y momentos clave de la competición. Aunque sí es cierto que me llamó poderosamente la atención el movimiento del UAE Team Emirates durante la última etapa, cuando salieron hacia delante desde el grupo perseguidor con Almeida cuando su compañero, el corredor catalán del equipo Marc Soler,  iba en el trío delantero junto a Primoz y Remco. No sé hasta qué punto el entendimiento entre el portugués y el catalán es bueno en las filas del equipo emiratí, ya que el primero remarcaba que “cada uno tiene su espacio deportivo” cuando se le preguntó por la ayuda de Marc en la consecución de la tercera plaza de la clasificación general de la competición. Palabras que quizás no signifiquen nada… o sí, si tenemos en cuenta que el catalán acabó en 4ª posición en la clasificación general justo por detrás de Almeida. Quizás con ello el portugués quería dejar claro su papel de líder en el equipo. 

Por otro lado, cabe reseñar la gran actuación de dos jóvenes en esta Volta 102 que vienen pisando fuerte (aparte, por supuesto, de Remco, que sigue disputando la categoría de joven a sus 23 años) y tuvieron un papel muy destacado en varias etapas de la carrera, Cian Uijtdebroeks, el joven belga de 20 años del Bora Hansgrohe y el francés Lenny Martínez, de 19 años, del Groupama FDJ, quienes terminaron la competición en 9ª y 12ª posición de la clasificación general. El primero, Cian Uijtdebroeks, comentaba en el último control de firmas que aunque ya el año pasado había ganado el Tour del Porvenir, el hecho de terminar en un top 10 una prueba WorldTour corriendo con los mejores ciclistas del panorama era ir un paso más allá en su desarrollo como ciclista. “Para mí es como si fuese una victoria”, comentaba a los periodistas en la línea de salida de Barcelona. Sin duda, creo que ambos tienen un futuro muy prometedor por delante y en esta Volta hemos podido ver esos primeros destellos de grandes estrellas que están por venir. 

La otra cara de la moneda, sin embargo, fue para el colombiano del Ineos Grenadiers, Egan Bernal, al que parece que la mala fortuna no deja de perseguirle en este 2023. Después de un parón por una lesión de rodilla se incorporaba en competición fuera de forma, consecuencia de no haber competido desde el mes de enero, y tras varias etapas en las que le vimos sufriendo más de la cuenta o perdiendo la estela de los hombres más fuertes de la carrera. En la sexta etapa sufría un revés más, con una dura caída que obligaba al ex campeón del Tour de Francia 2019 a retirarse nuevamente de la competición. A pesar del daño de la caída, el equipo informaba de que, afortunadamente, no tenía ninguna fractura o lesión de gravedad.

© Laura M. Taberner

Otro que también se incorporaba a la competición tras una operación de amígdalas fue el campeón ecuatoriano del Education First, Richard Carapaz, quien a pesar de no estar tampoco en su mejor estado de forma, le vimos tomando protagonismo en las escapadas de varias jornadas. Seguro que muy pronto tendremos a la mejor versión del ecuatoriano de vuelta. 

Destacar también la gran actuación del ciclista del Alpecin Deceuninck, Kaden Groves, quien se llevó el gato al agua en dos ocasiones durante la semana, en dos llegadas al sprint en las etapas 4ª y 6ª. Muy aplaudida la segunda de ellas, pues el australiano había pinchado y tuvo que cambiar de bicicleta y volver a las posiciones delanteras, a tan sólo unos kilómetros de la línea de meta. 

El que, muy a mi pesar, considero que pasó más desapercibido de lo que se esperaba en un principio, fue el alavés Mikel Landa, quien finalizó en  5ª posición. 

La Volta 102, sin lugar a dudas, ha sido la antesala de lo que nos espera en el mes de mayo, en la primera de las Grandes Vueltas de la temporada y aunque a nivel de carrera hay algunos puntos que podrían mejorarse, como por ejemplo el apostar por un recorrido algo más variado de cara a las próximas ediciones, sí que hay que recalcar la estupenda labor y predisposición de los voluntarios y personal de la organización que han facilitado la faena a los medios y han brindado un trato estupendo. 

Concluyendo con todo lo comentado, una Volta escrita con “R”:  “R” de Remco. “R” de Roglic. “R” de rivalidad, pero de la sana. “R” de maravilloso “Regalo” para la afición ciclista, quien una vez más ha podido ser testigo de una de esos duelos que quedarán grabados para la posteridad. Difícil presagiar lo que está por venir y quién será el portador de la maglia rosa al llegar a Roma a finales de mayo. El tiempo y la competición nos lo dirán… 

© Laura M. Taberner

La “Pogačarmanía”: un marciano que vuela, que no pedalea

El ser humano, en multitud de ocasiones, es de memoria corta y se deja llevar por la euforia desmesurada del momento. Creo que es un poco lo que está pasando estos días entre aficionados y diferentes medios de prensa y entendidos con respecto a un joven ciclista que, desde luego, y creo que nadie lo pone en duda, ha venido para marcar una época en esto del ciclismo: Tadej Pogačar. 

Los números del esloveno en lo que va de temporada hablan por sí sólos: trece días de competición acumulados de los cuales siete han finalizado con victoria de etapa y dos clasificaciones generales, sin contar las victorias o primeros puestos en clasificaciones de montaña, por puntos o del mejor joven. Está claro que el del UAE Team Emirates no pedalea, sino vuela, muy alto y de forma inalcanzable para los que se suponen son sus rivales más próximos. Se vio en la Clásica de Jaén, se vio en Andalucía y se ha visto esta semana pasada, tras un cambio en su habitual calendario y no acudir al UAE Tour, en la París-Niza, donde había una gran expectación al ser el primer encuentro directo entre el esloveno y su rival más directo, el ganador del Tour de Francia 2022, Jonas Vingegaard. Lo que está claro es que tanto le da ganar en caminos de sterrato en campos de olivos, en alta montaña o disputar un sprint con hombres rápidos. Es más que un todoterreno, se podría decir que es un extraterrestre que nos deleita con sus “marcianadas” día sí, día también. 

Aparte de ser un portento físico, es un tipo listo y bien asesorado. En esta París-Niza se volvió a ver. Sabe que debe compensar las carencias que pueda tener a nivel de equipo ante otros rivales con equipos más poderosos como podría ser Jonas Vingegaard y el Jumbo Visma, quienes se presentaron en la competición francesa con un “equipito” para temblar, con la presencia de Affini, Dennis, Foss, Kooij, Tratnik y Van Hooydonck. Ideal para tomar una ventaja desmesurada en la crono por equipos y un tiempo que fuese insalvable en la clasificación general para el esloveno u otros equipos tan potentes como el Ineos Grenadiers con la presencia de Daniel Felipe Martínez, el Jayco Alula con el británico Simon Yates o el equipo francés Groupama FDJ con un David Gaudu que nos maravilló con una actitud valiente y un salto de calidad respecto a temporadas anteriores. 

© ASO / Vialatte

Pero Tadej fue previsor y, desde el minuto uno de la competición, estuvo saliendo a todos los ataques, cerrando huecos, sumando segundos de sprints intermedios y añadiendo tiempo extra para aminorar todo lo posible esa diferencia de tiempo que, con certeza, en la crono por equipos, el equipo neerlandés iba a sacarle a él y a su equipo,  y que podría ser un factor determinante a la hora de luchar por la victoria en la clasificación general de la competición. 

Todos estos aspectos comentados han sido fácilmente constatables y seguramente quien haya echado cuentas de tiempos en cada etapa ha podido verlo. Está claro que el equipo lo tenía bien medido y calculado y todas las exhibiciones del esloveno han sido, en parte, para asegurar la victoria en la clasificación general sin verse en apuros y, como una hormiguita, ha ido sumando diferencia respecto a sus máximos rivales, día a día, a pesar del desgaste extra que eso pueda conllevar para el ciclista. 

Es aquí donde estos días he querido analizar las reacciones de los expertos y periodistas de otros medios respecto a la actuación del esloveno y contrastarlas con mi postura sobre el ciclista del UAE Team Emirates. Ha habido de todos los colores y varias me han llamado la atención por lo que he comentado al iniciar el artículo: la corta memoria que puede llegar a tener el ser humano y el dejarse llevar por la euforia del momento. 

En estos días he leído artículos y reacciones diversas con las que me he sentido más y menos identificada, y he de confesar que algunas me han parecido posturas que rozaban el fanatismo. 

Comentaba Marcos Pereda, para “El Confidencial” ( reconozco que soy una gran seguidora de los escritos y artículos de Marcos, cosa que él mismo sabe) que el esloveno es “el favorito en todos sitios todo el tiempo” y coincido con él en ver el factor “diversión” que se refleja en la cara de Pogačar como elemento sine qua non en la forma de entender la competición para este ciclista de eterna sonrisa en la cara, que siempre tiene momento para gastar alguna broma o incluso comunicarse a través de las cámaras de televisión con los espectadores que siguen la carrera desde casa, ya sea en medio de una ascensión a un puerto duro, tras un ataque para coger distancia respecto a sus rivales o al llegar a meta exhausto.

Detalles que son de agradecer y que hacen del esloveno un tipo carismático y querido por la afición, aparte de por sus excepcionales exhibiciones que, desde que entró en escena en el profesionalismo de este deporte, se han vuelto una marca de la casa y seña de identidad. El cántabro hace una comparativa del esloveno con figuras variadas pero de las que han marcado la historia del ciclismo: Merckx, Anquetil, Kelly, Indurain… y creo que no exagera en hacer tal comparativa, siempre he visto al esloveno como uno de los que marcará una época, pero no se aventura a hacer previsiones sobre los resultados a futuro en la temporada del ciclista más lejos de lo visto hasta el momento. 

© ASO / Vialatte

Más allá del disfrute de ver correr al ciclista ha ido Iban Vega en el “Cuaderno de Joan Seguidor”, quien se ha mojado un poco más y con el que he de reconocer que comparto opinión, si no similar, se podría decir que idéntica, en lo que a las futuras exhibiciones del esloveno se refiere. Y es que parece que Iban también ha visto la exacerbada reacción en redes de otros medios y aficionados en las actuaciones del esloveno que lo dan por claro ganador del Tour 2023 sin tener en cuenta factor alguno aparte de la superioridad que, hasta la fecha, ha mostrado el del UAE. Uno que por ejemplo se ha atrevido a posicionarse de manera categórica al respecto ha sido Mikel Ilundain, colaborador del podcast  “A pie de Puerto” y compartido en redes por su compañero Fran Alarcón, quien sentenciaba: “Vingegaard en el Tour este año corre para hacer segundo”. 

Me asombra que la gente tenga la memoria tan corta, que se atrevan a asegurar de forma contundente la victoria de Tadej y menosprecien lo que puedan hacer sus rivales . Y, ojo, eso no quiere decir que el esloveno no me guste o piense que no sea excepcional, pero creo que no se debe caer en el fanatismo o en posiciones tan tajantes cuando entran en juego tantos factores. Pienso, y con ello me gustaría hacer un llamamiento a ‘Matxín’ y los suyos, aunque estoy convencida de que lo tienen ya todo bien estudiado de cara a la competición francesa, que no hay que volver a tropezar en la misma piedra dos veces y repetir errores en este 2023 ya cometidos a lo largo de la temporada pasada.

Hay que ser previsores y, si se pretende ganar el Tour, ir con los deberes bien hechos. Creo que no se puede dejar la búsqueda de la victoria, sólo y exclusivamente en manos de la excepcionalidad de un ciclista, en una competición de tres semanas. La fórmula puede funcionar en carreras de un día o de una semana como Andalucía o París Niza, porque el esloveno está muy por encima de sus rivales, juega en otra liga, se mueve en un nivel superior ahora mismo. Pero también pienso que no se debe caer en generalizaciones como se ha hecho por parte de algunos aficionados, medios o entendidos de ciclismo en redes estos días, y tener en cuenta que una Gran Vuelta es cosa de veintiún días de esfuerzo, aparte de los mil factores externos que pueden condicionar los resultados, lo que conlleva un desgaste muy prolongado, y más si se corre al estilo Pogačar

Ya se vio claramente en la edición de 2022 la importancia que tiene el papel del equipo, con el ejemplo del Jumbo Visma y la victoria de Vingegaard, de saber guardar fuerzas, de atacar en el momento justo, de calcular y medir cualquier esfuerzo para el día D y hora H. Ese momento donde se marca la diferencia decisiva en los puestos de podio, el momento clave en que se debe tener la fuerza necesaria para atacar para la victoria o ser atacado y poder responder con creces y seguridad, sin perder ese primer puesto de la clasificación general en dicho ataque. ¿Que esa forma de correr deja menos hueco a las hazañas y a la épica? Ya están las carreras de un día y competiciones de una semana para ello, pero creo que si la intención es ganar en una competición de larga duración la estrategia ha de variar. 

© ASO / Vialatte

Por ello creo, desde mi humilde opinión, que si se pretende ganar de nuevo en 2023 se debe ser más consciente del importante papel que deben tener todos y cada uno de los ciclistas que rodeen a Tadej para hacerse con el maillot jaune nuevamente. Al fin y al cabo, el ciclismo no es deporte de un individuo, es cosa de un equipo, y todos y cada uno de los integrantes son relevantes y de máxima importancia para hacerse con la victoria. Por tanto y consecuentemente, la elección de los integrantes para conformar el equipo del UAE Team en el Tour y la actuación de los gregarios cada día de competición debería ser tan o más importante que las exhibiciones diarias que el esloveno pueda brindar en la competición, pues cuando se trata de una prueba de tres semanas cada detalle cuenta y la estrategia de equipo debería contemplar todos estos puntos, y todos los imprevistos (sean caídas, enfermedades y demás) que puedan ir surgiendo, al máximo posible, en el camino a París. 

Aparte de eso tampoco hay que olvidar los estados de forma y la evolución del resto de ciclistas. Llevamos poco de temporada y quizás algunos ciclistas que han estado estos días disputando la competición francesa no han estado rindiendo al cien por cien. Eso es algo que hay que tener presente. Aunque no soy experta en preparación física ni entrenamientos, he hecho deporte muchos años de mi vida, y sé que los estados y picos de forma van variando y fluctúan según el tipo de entrenamiento que se esté llevando a cabo, según la previsión de los objetivos que se tengan y puede que la planificación de Tadej no sea la misma, y como consecuencia el estado de forma, que la de Yates, Gaudu, Vingegaard, entre otros, a día de hoy y eso pueda variar en tres o cuatro meses. 

Así que, con todo ello, yo me quedo en una posición más prudente. Al César lo que es del César: está claro que Pogačar es un ciclista excepcional, no sólo por sus números y registros, también por su estilo al competir, la suma y diversidad de títulos y victorias que ya ostenta a sus tan sólo 24 años, o su forma de disfrutar como un niño encima de una bicicleta. Pero creo que jamás expresaré de forma tajante y rotunda la victoria por adelantado de un ciclista, sea quien sea. Creo que hay muchos otros, se llamen Vingegaard, Yates, Landa, Gaudu, Carapaz y demás, que seguro tendrán algo que decir en la Grande Boucle

Análisis de las invitaciones a La Vuelta 2023

Como bien reza el refrán del famoso poeta español Francisco Quevedo, el dinero abre puertas con mayor facilidad a quien lo posee (y lo aporta en este caso) que al que lo tiene en menor medida. Y es que, en la edición de La Vuelta 2023, parece que las invitaciones a equipos UCI Pro Teams han beneficiado a equipos hasta la temporada pasada en la máxima categoría como el Lotto Dstny (invitado por derecho al ser el primer equipo de la segunda categoría con más puntos)  o al potente equipo francés Total Energies frente a varios equipos más humildes económicamente del territorio español como son el Kern Pharma y el Euskaltel Euskadi.

No podemos obviar que el equipo Total Energies, al ser patrocinador oficial de La Vuelta, parecía tener la participación en la ronda española más que asegurada dinero mediante. En el caso del primero, Lotto Dstny, se entiende su invitación por lo mencionado anteriormente: ser el equipo de categoría profesional continental mejor situado en la clasificación por puntos de la UCI, pero teniendo en cuenta que se ha dejado fuera a otro equipo bastante potente que hasta el año pasado también era World Tour como es el Israel Premier Tech parece que el conjunto de equipos invitados queda algo descafeinado o con ausencias de equipos de interés general.

Así pues, con la ausencia del equipo israelí, decimos adiós a la posibilidad de volver a ver al cuatro veces campeón del Tour de Francia y también ganador de La Vuelta en 2011 y 2017, el sudafricano Chris Froome. Veremos si en el futuro volveremos a ver al ex campeón tomando parte de la competición española nuevamente. Lo que está claro es que no será en esta edición. 

Por otro lado, no puedo pasar por alto la opinión popular en este asunto, pues creo que muchos son los aficionados que en estos días han manifestado su descontento en la selección de equipos propuestos por la organización de La Vuelta para participar en la competición de este año. Sin embargo, desde mi punto de vista, no todo son sombras en la decisión de los equipos invitados propuesta por Javier Guillén y su equipo. 

Caja Rural regresa al pelotón de la Vuelta © Photogomezsport

Si analizamos la propuesta hay que remarcar como un punto muy positivo la presencia, tras un año de ausencia, del equipo español Caja Rural Seguros RGA. Particularmente debo reconocer que el año pasado me quedé con ganas de ver a algunos de los ciclistas de esta escuadra en acción en la competición española puesto que tengo la sospecha de que podrían ofrecer buenas actuaciones durante muchos días de la carrera.

Seguro que, al volver a tener la oportunidad de participar, darán juego y serán protagonistas en muchas escapadas, tal y como hace años nos tenían acostumbrados (en mi memoria tengo grabadas las escapadas de mi paisano Lluís Mas o las brillantes actuaciones de un joven prometedor como Álex Aranburu). Hombres como Fernando Barceló, Jefferson Cepeda, Orluis Aular, Julen Amezqueta o el veterano Edu Prades seguro tendrán algo que decir, pues han ido dando pistas del buen estado de forma que tienen, y son ciclistas a tener en cuenta no sólo en escapadas, sino como candidatos a llevarse alguna victoria de etapa de la carrera u ostentar alguno de los maillots de la competición.

Debo reconocer que vi como un gran error la ausencia este año de un equipo tan mítico y querido como es el Euskaltel Euskadi. A fin de cuentas, el ciclismo y la afición vasca son un punto de mucho peso y gran importancia en lo que conforma el ciclismo español y su ausencia se hará notar. Aparte de ello, hay que reconocer que el equipo vasco ha encarado con muchas ganas y actuaciones interesantes con un papel muy activo sus últimas participaciones en la competición española. Una lástima que hombres como Luis Ángel Maté, José Antonio Soto, los hermanos Azparren , Mikel Bizkarra, el gallego Carlos Canal o Gotzon Martín, a quienes se les ha visto muy bien al inicio de temporada, tengan que ver la carrera desde la cuneta. 

Froome será uno de los grandes ausentes © ASO

Muchos aficionados han comentado que debería haber tenido la oportunidad de correr este año el Kern Pharma o el Euskaltel en lugar del equipo Burgos BH (agradecer a todos los que habéis participado aportando vuestras ideas y opiniones en el video lanzado esta semana). Sin embargo, hay que tener en cuenta que desde la Diputación de Burgos se aporta cierta cantidad económica en la organización del evento que, sin duda alguna, habrá tenido que ver en la decisión de Guillén y los suyos a la hora de priorizar la invitación al Burgos por delante del Euskaltel o Kern Pharma. Aparte también hay que reconocer que el equipo burgalés tuvo una muy buena actuación en la edición pasada, ostentando el maillot de montaña por Víctor Langellotti durante buena parte de la competición. 

Lo que está claro que, si tanto Total Energies sigue patrocinando La Vuelta, como la Diputación de Burgos aporta cierto dinero a la misma y el primer equipo de la segunda categoría tiene invitación por derecho propio a la ronda española, sólo quedaría una vacante real (a lo sumo dos si coincidiese que el Total Energies fuese el primer equipo por clasificación de la segunda categoría) en las invitaciones a los equipos profesionales continentales españoles.

Una pena, desde mi punto de vista, que no haya un margen mayor o se presione más a la UCI desde las mismas organizaciones para aumentar el número de equipos participantes en las Grandes Vueltas. Una normativa que debería revisarse para dar oportunidad a equipos más modestos a poder participar, pues al final, si las invitaciones reales se reducen a uno o dos equipos, se seguirá asegurando la participación de los mismos a golpe de talonario. 

Los sprints de la controversia

Resulta paradójico abrir un nuevo espacio para opinar sobre diferentes aspectos que conciernen al ciclismo y empezar hablando por el final de las carreras, en este caso de los sprints, en lugar de los inicios de estas.

En primer lugar creo que lo más lógico es que me presente. Mi nombre es Laura (Laura Máñez Taberner, aunque en redes soy Laura M. Taberner por motivos que quizás más adelante explique) y llevo ya varios años, o muchos según se mire, ligada al ciclismo (ya sea profesional o aficionado) desde diferentes enfoques, tanto por la práctica del mismo como desde otros ejes de actividad. Ya hace meses que Jorge Matesanz, el creador y artífice de este proyecto que es High Cycling, me propuso colaborar en él de una forma más activa y constante a través de una columna de opinión basada en el punto de vista que pueda tener yo sobre los diferentes acontecimientos o aspectos diversos que pudiesen suceder de aquí en adelante. Al principio me dio algo de vértigo exponer mis pensamientos tan abiertamente o dar mi punto de vista que, posiblemente en muchas ocasiones, pueda no ser acorde al de gran cantidad de lectores o aficionados del ciclismo, pero la intención que se pretende con este espacio es hablar de ciclismo de una forma subjetiva pero constructiva, jamás como algo que pretenda dañar o menospreciar yendo más allá de la mera información de los hechos. Así que finalmente decidí envalentonarme y aquí está el primer artículo, con la intención de no dejar nada en el tintero de todo aquello que pueda pensar sobre diferentes aspectos vinculados a este deporte. 

Si tuviera que resumir en una idea lo que ha supuesto este fin de semana de ciclismo profesional creo que sería la controversia que puede generar un sprint. Vayamos por partes.

Siena. Mediodía del Sábado. Se disputa la edición femenina profesional de una carrera tan emblemática como la Strade Bianche donde vemos a una Kristen Faulkner, del Jayco Alula, retorciéndose en la durísima rampa de Via Santa Caterina tapando huecos como buenamente puede al paso del dúo Kopecky (la belga que ganó en la edición pasada) y Vollering, del todopoderoso SD Worx, quienes adelantan a la estadounidense colocándose así en primer y segundo puesto de la clasificación justo a trescientos metros para llegar a línea de meta.

Vollering adelanta a su compañera Kopecky en Strade Bianche © RCS

Fueron varias personas, tanto las comentaristas de Eurosport España (la emblemática Dori Ruano como su compañera a los micrófonos Laura Álvarez) como otros diversos entendidos en materia como, por mencionar alguno, el popularísimo experto, comentarista belga y Youtuber Benji Naesen, quienes se ponían las manos a la cabeza al ver como la alemana Vollering disputaba el sprint a su compañera y líder de equipo Kopecky, consiguiendo la victoria de la carrera. Se abrió así un debate en Twitter donde no pude evitar participar en varios hilos. En ellos y aquí me posiciono en  considerar lógico y normal que la neerlandesa dispute la carrera a su compañera de equipo.

Como bien comenté, el deporte conlleva competición y la finalidad última de la competición, pese a quien le pese, es ganar. Si dos ciclistas que son del mismo equipo superan a todas las adversarias de otros equipos y se ven como primera y segunda en una carrera de un día que es una clásica con tanto prestigio, un “casi monumento” (lo llamo así porque ya hay medios como Marca que ayer mismo ya lo catalogaban en sus titulares de forma errónea como monumento) como es la Strade Bianche, lo más lógico es que se dispute, no que entren de la mano como si de una hermandad se tratase.

Otra cosa sería que fuese una competición por etapas o una gran vuelta donde lo que se busca y disputa es una clasificación general. Así que muy aplaudida por mi parte la acción de las dos ciclistas y del equipo SD Worx, así como la valiente escapada en solitario de Faulkner que se hizo finalmente con la tercera posición. 

Pasando a otro sprint que dio qué hablar este fin de semana. Fue el protagonizado por el ciclista del Lotto Dstny, Caleb Ewan, junto con el ciclista belga Gerben Thijssen, del Intermarché Circus Wanty en la clásica Grote pris Jean Pierre Monseré. Ambos ciclistas entraron en línea de meta con una diferencia minúscula, que llevó a un enredo mayúsculo entre todos los que presenciaron el mismo. Ni siquiera consultando la foto finish en línea de meta se llegó a esclarecer quién había tocado la línea de meta en primera posición aunque por la misma instantánea el vencedor proclamado por la organización de la prueba fue el belga Thijssen.

Vista aérea de la llegada © Eurosport

El corredor del Lotto Dstny mostraba su disconformidad por el resultado en redes valiéndose de unas fotografías desde otro ángulo donde se veía con total claridad que su rueda tocaba la línea de meta antes que la de su oponente. Ante estas pruebas muchos aficionados tomaban parte por la victoria del australiano pero en otros vídeos a cámara lenta en otros ángulos la ventaja del australiano no es clara. Situación que recuerda a la vivida hace un tiempo por Pidcock y Van Aert en la Amstel Gold Race

Creo que ante una situación como ésta, y al no tener una resolución clara e irrefutable, la organización de la prueba debería haberlo resuelto con un empate técnico. Muchos comentan que la foto finish no estaba situada exactamente en la línea de meta. También se ve que esa línea de asfalto no es completamente plana y la parte donde traza el recorrido la rueda del belga sobresale a la del australiano. En principio parece que las cosas quedarán como estaban aunque ha sido un sprint que ha traído cola y posturas opuestas. 

Y otros sprints que parece que están animando a los aficionados a opinar son los protagonizados por el belga Tim Merlier, que se impuso en la primera etapa de la competición por etapas París Niza añadiendo un triunfo más a su brillante inicio de temporada con el Soudal Quickstep. A raíz de ello ya surgió la opinión que se va extendiendo con el hashtag “Merlier al Tour” de que debería ser el belga, que por cierto fue padre hace apenas unas semanas, en lugar del ciclista de Países Bajos, Fabio Jakobsen, quien con su rendimiento más desapercibido parece no tener la puntería en los sprints de antaño.

Así la afición hace un llamamiento al controvertido mánager del equipo, Lefevere, para que se decida a llevar al belga en la alineación oficial del equipo para disputar el Tour de Francia de esta temporada. Para mí sí que es cierto que el belga está logrando unos resultados notables y a tener en cuenta a la hora de seleccionar a los ciclistas para el Tour, pero considero que a estas alturas es demasiado pronto tomar parte por uno o por otro, pues la racha puede cambiar en cualquier momento e invertirse los resultados en cuestión de semanas. Veremos cómo se suceden los acontecimientos en las próximas clásicas de la primavera en las filas del equipo belga y quien, finalmente, se consolida como líder para disputar la ronda gala. 

Ewan bate a Thijsen, pero la victoria fue otorgada al de Intermarché © Sprint Cycling Agency

3 Respuestas

  1. Comentarios muy acertados en lo que respecta a la carrera de féminas y que secundo totalmente y en cuanto al resto del artículo, perfecto. Se nota que hay conocimientos y base de ciclismo en ellos. Sigue así.

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