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La década de Nairo Quintana (2012-2013) -parte I-

Hace ya una década que Nairo Quintana comenzó a dar que hablar aquí en Europa (Nairo Alexander Quintana Rojas, que diría el amigo de TDP). Desde entonces el de Cómbita, Boyacá, Colombia, ha dado mucho que hablar y hecho correr ríos de tinta, para lo bueno y para lo malo. Pero esto no trata de ser una biografía ni un seguimiento de la carrera del colombiano.

Más bien lo que se pretende es analizar la raíz del, desde mi punto de vista, punto de inflexión de Nairo, en el devenir de su carrera. No hablamos de palmarés en absoluto, sino de sensaciones y de modelo, o si quieren, de icono ciclista.

Hace una década se pretendió por muchos ver que estaba ante nosotros el siguiente escalador ultramítico -cómo le gusta a muchos esa definición-, siempre con el recuerdo de Marco Pantani en la mente, dado que muchos apenas han visto otros escaladores de ese fuste y perfil. Lo que vamos a analizar es el motivo de ese paso de esperanza ante un ciclista que prometía haber hecho levantar de sus sofás a muchos amantes de este deporte, a un ciclista con un palmarés más que envidiable, pero que fuera de su país natal, despierta más indiferencia cuando no rechazo, que admiración.

Obviamente, todo en la vida tiene muchos matices y no vamos a ser tan pretenciosos ni simplistas como para esquematizar todo en un momento, pero creo que dicho episodio -Tour de Francia 2013- marcó extremadamente el devenir como ciclista -reitero, aquí no se va a analizar el palmarés, que lo tiene bien lustroso- del colombiano.

Nairo Quintana conquista para Movistar su primera etapa en el Tour de Francia

Tras su Tour del Porvenir y la buena música que llegaba desde Colombia, Movistar puso su atención sobre el colombiano y lo enroló en sus filas. Fue un fichaje poco sonoro, pero ya en su primera temporada dio que hablar y consiguió varios éxitos, alguno de ellos más sonado, como su triunfo en el Dauphiné él solo contra todo el Sky tirando detrás en el mítico Joux-Plane.

Ese triunfo en Morzine fue el primer sello de la casa. Anteriormente ya había vencido en Murcia y posteriormente lo haría en el Giro dell´Emilia, siendo además del grupo de favoritos en todo un monumento como Lombardía. Era su carta de presentación ante el gran público, y en una carrera también en tierras francesas, la Route du Sud realizó una gesta importante, llegando en solitario sacando minutadas a sus rivales, muchos ya comenzaron a salivar imaginándose lo que podría deparar este colombiano, el nuevo Jardinerito. En la Vuelta ayudó en las etapas finales a Alejandro Valverde e iba tomando experiencia dejándose ver frente a lo que estaba por venir. Las expectativas no paraban de crecer, así como las ilusiones de muchos por ver al nuevo escalador pata negra.

Y así llegamos a su temporada clave. Año 2013. Este era el año donde tenía que refrendar el esbozo presentado la temporada anterior, ahora contra los primeros espadas y en la pruebas de fuste. Su comienzo fue bueno, con buenas prestaciones en Paris Niza, realizando una muy buena cronoescalada al Col D´Eze, pero escasas semanas después ya toca la confirmación en la Volta, apuntándose etapa y quedando en los puestos de tronío en la general final.

La cosa pintaba bien, escalador puntero que aprovechaba bien su terreno frente a los capos. Pero la campanada llegaría poco después, en la Itzulia. Tras adjudicarse una nueva etapa, llegaba a la crono final muy bien posicionado, pero ahí saltó la sorpresa, Nairo sólo es batido por Tony Martin y les levanta la general a gente del nivel de Contador o Richie Porte entre otros. Aparte de confirmar sus prestaciones cuesta arriba, demuestra que tampoco es manco contra el crono si la carretera pone cierta dureza.

El esbozo del año anterior se confirmaba más de lo que todos pensábamos, pero llegaba unos meses depués el momento de la verdad. La Ronda gala. Ahí no partía como cabeza de filas, puesto que le tocaba al ya por entonces veterano Alejandro Valverde. Era una carrera para ayudar al murciano y ver hasta dónde podría llegar el colombiano en la carrera entre las carreras y ante la florinata del ciclismo. Una etapa en la montaña y, por qué no, un maillot de mejor joven podían ser muy buena carta de presentación en su primer Tour. Pero nadie contaba con él para la general. Froome, Contador, Purito y demás estaban muy por encima en todos los pronósticos.

Tras unos primeros días en los que el colombiano pasa desapercibido, pero sin dejarse tiempo, bien clasificado en la general, llega el primer momento clave.

Primera jornada pirenaica. Ax-3-Domaines con Pailheres como plato fuerte -y único- antes de la subida final. Ahí sucede uno de los momentos, a mi juicio, críticos en la carrera de Nairo en Movistar. Con un SKY todavía bastante al completo, y sin endurecer nadie la carrera, parte Nairo a mitad de subida. Sólo ellos conocerán las intenciones o si ese movimiento estaba ordenado por el equipo.

Nairo Quintana antes de la salida de una etapa en el Tour 2013

La cuestión es que Nairo va haciendo camino, pero ante un SKY con bastantes unidades en el grupo perseguidor, y con una actuación memorable de Kennaugh -del que no recordamos otra semejante-, finalmente la pequeña diferencia que llevaba, queda en nada en la subida final donde paga el calentón previo y queda por detrás de su compañero Valverde -en una gran actuación- y de los SKY Froome -que se coloca como máximo favorito tras su primera exhibición- y Porte.

Desconocemos el motivo del ataque, si fue algo ordenado o si fue motu propio por parte del colombiano. Sea como fuere, muy mal planteado. Un ataque lejano ante una estructura como SKY no tiene muchos visos de éxito si antes no has logrado limpiar de gregarios al grupo principal. Es bastante dudoso que el ataque fuera como puente para Alejandro, pero ahí queda la posibilidad. O simplemente dejar la jugada favorable para que el murciano tuviera la excusa de no tirar en la subida final. Ya digo, sea como fuere, en mi opinión es el primer error que a la postre fue decantando su forma de correr.

Siguiente jornada. Salida loca y Froome se queda solo -inexperiencia del propio Froome como motivo parcial de su soledad- tras las ascensiones a Portet d´Aspet y Mente. Saltan las alarmas, el líder completamente solo. Pero el mal momento de corredores ofensivos como Alberto y la vista de Froome a la jugada a dúo entre Plaza y Valverde -momento clave- hace que el líder salve los muebles momentáneamente.

Pero quedan tres primeras categoría por delante y el líder está solo. Buen trabajo de Movistar para aislar a Froome y que no entre compañero suyo por detrás, pero luego, pasan y pasan los kilómetros, y sólo un tímido ataque de Nairo en la subida final, a distancia de seguridad, que es controlado por el líder.

Segundo momento clave. En la jornada previa el colombiano parte con todo el equipo SKY por detrás, y en este día de rendimiento coral inverso de SKY, con Froome solo… Y el colombiano quieto. Siempre se comentó que en los puertos el murciano no lo estaba pasando muy bien y eso fue lo que frenó el posible ataque del colombiano. Nunca lo sabremos, pero es evidente que fue una gran oportunidad perdida y una segunda muy mala lectura de carrera. De poner contra las cuerdas al líder, Movistar pasó a hacerle la carrera probablemente pensando en los intereses de un Alejandro Valverde muy bien posicionado en la clasificación general.

Y como estaba previsto, si no aprovechas las oportunidades… Palazo de Froome en la CRI en el icónico Mont Saint Michel que deja medio vista la carrera. Sin embargo, para los intereses de Movistar la cosa pinta bien. Tras Pirineos y la CRI, Alejandro Valverde es segundo en la general, mejor casi imposible para sus intereses -no creo que ni el más optimista dentro de Movistar pensara en luchar la victoria en el Tour-, y Nairo está ya muy lejos de Froome, pero mantiene un buen puesto en la general. Pinta para que pueda luchar por su primera etapa en la carrera por excelencia.

Sin embargo, cosas de la vida, digo del Tour, camino de Saint Amand Montrond, acontece lo inesperado. Viento, abanicos, y liada de Alejandro Valverde. Contador aprovecha y su equipo le situará más cerca de la general. Nairo, más avispado en estos movimientos que el murciano -ya desde estos momentos el colombiano sorprende por su saber estar en este tipo de condiciones que en principio le serían adversas, pero en las cual se ha acabado moviendo como pez en el agua salvo una vez, y esa pudo ser la definitiva para lograr su ansiado sueño amarillo, cosas del Tour-, logra entrar con el grupo del líder y finalmente, ante el descalabro de Valverde, se coloca como el mejor ubicado en la general por parte de un Movistar que demuestra en quién estaban puestas todas las bazas, a Nairo le dejan solo.

Nairo Quintana corona el Mont Ventoux en segunda posición

Este nuevo giro del guión deja al conjunto navarro a cuadros… El mejor colocado en la general es Nairo pero se encuentra 8º a más de 5 minutos. El murciano ya ni cuenta, el palo moral del día le deja tocado para el resto de la carrera. Toca cambiar el guión, pero aquí ya no se mueven tan bien los de Unzue.

Sin tiempo para el respiro, se viene el gigante de la Provenza. Jornada unipuerto, como casi siempre, pero la simple presencia el monte pelado ya es motivo para el respeto ante lo que se avecina.

Acontece una repetición de la jugada de Ax-3-Domaines. Nairo ataca sin endurecimiento previo por parte de su equipo ante un SKY todavía bastante compuesto, y la jugada es parecida. Kennaugh y en este caso, Porte, realizan una labor de preparación del despegue por parte de Froome, en este caso literal… Mientras Chris va derrapando en las curvas y Alberto Contador intenta seguirle, el tiempo que ha logrado Nairo queda en la nada. Froome le coge y le deja, aunque al menos en esta ocasión la sangría es menor y además es el segundo en la etapa.

Esto es, mete tiempo a todos sus rivales exceptuando al anglo-keniata. Sigo sin ver la lógica. Cuando tienen superioridad y Froome está aislado, no atacan, y atacan a destiempo con el colombiano cuando tiene su estructura bien compuesta. Y aquí ya no hacía de puente de nadie y era el mejor posicionado del equipo.

Comienza a coger forma que el absentismo en la segunda jornada pirenaica tiene un motivo claro, pero una vez más la mala elección del movimiento vuelve a pesar -y mucho- en el devenir de la carrera del de Boyacá. Para el recuerdo la imagen de un Nairo exhausto tras cruzar la meta al intentar aguantar hasta el límite y más allá el ritmo endiablado de Froome hasta que no pudo más.

Tras esta jornada ya está todo visto para sentencia en Movistar. El líder es el colombiano, que se encuentra a minuto y medio del podio y con todos los Alpes esperando. La oportunidad de Alejandro tendrá que quedar para otro año.

Podio final del Tour de Francia 2013, con Nairo Quintana a la izquierda

Tras una cronoescalada discreta para lo que son sus posibilidades, llega Alpe d´Huez. Ración doble, extravagancia que no se ha vuelto a repetir desde entonces. Primer paso sin nada que reseñar, pero ante el segundo paso, Movistar se mueve para hacer exigente la entrada y lanza al murciano por delante. Mal nuevamente, y sin fuerzas, el murciano es engullido previo a una nueva locura por parte de Froome. Sin motivo y sin causa, ataca y lo que es peor, muestra sus carencias al poco tiempo.

Purito y Nairo van progresando, le cogen, y salta la sorpresa, le dejan. Nairo ya como líder del equipo muestra un cambio apreciable. No ataca hasta escasos km a meta, ataque que es el que provoca que Froome pierda comba. Pero le vale para, en compañía de Joaquim Rodríguez, llegar por delante en la mítica cima -siempre con algún fugado por delante, esa etapa ha estado privada para el colombiano- y colocarse ya en el podio, a escasos segundos de un flojo Alberto Contador.

A partir de esta jornada ya se comienza a vislumbrar ese punto de inflexión, coronado en la jornada posterior, con un Froome que ya ha mostrado sus debilidades en ADH y aislado, y a mayores con varios Movistar por delante, el colombiano no se mueve. ¿Instrucciones?. Nunca lo sabremos, y probablemente no hubiera valido para voltear la carrera, pero ese conformismo ante una situación así, es lo que ha ido jalonando el devenir de Nairo en Movistar. Se podría entender dada su juventud -quién lo diría ahora, una década después, joven con 23 años…-, pero está claro que fue un error.

Y ya donde queda la táctica consagrada es en su primera victoria en la ronda gala. Última etapa y ya llega la seña distintiva del posterior Nairo Quintana. Mientras Alberto Contador, como estaba cantado, cede, el colombiano se mantiene toda la subida a rueda de un Joaquim Rodríguez soberbio, que en su disputa por el podio con el de Pinto, lleva en butaca a Froome y al colombiano. Froome vuelve a cometer un error, más bien un delito, y finalmente Nairo, aprovechando la más pura distancia Purito, se lleva la etapa, la montaña, el maillot blanco y el segundo puesto en la general.

Todo es alegría en Movistar y en Colombia. Pero esto marca su futuro. La lectura es clara, movimiento lejano igual a pérdida de tiempo, táctica CBR y aprovecharse de los movimientos ajenos hasta momentos próximos a meta igual a prosperar. Una lectura muy sesgada y parcial que siembra el camino posterior de Nairo Quintana en Movistar.

A mi modo de ver son varios los factores que aquí se mezclan, liderazgos compartidos, engrosar las filas de un equipo no muy ofensivo y finalmente incluso el colombiano parece haberse habituado a dicho papel con buen gusto.

Ya digo, esto le ha deparado multitud de triunfos, su palmarés así lo atestigua, pero creo que esa carrera marcó y mucho su forma de correr, y buena parte vino debido a decisiones erróneas en sus movimientos ofensivos, y lecturas de carrera a su vez erróneas, cuando a rueda le fue mejor.

El Nairo anterior a estos momentos no destacaba por correr de esta forma, de hecho, tuvo varios movimientos en sentido completamente contrario, con ataques lejanos o muy lejanos. Creo que fue la lectura equivocada de esta carrera por su propio equipo y que a él tanto le repicaron lo que volvieron al colombiano, en ocasiones, casi un meme sobre ruedas, con momentos exasperantes para cualquier amante del ciclismo.

Dos años después -lo de su ausencia en 2014 es otro momento inexplicable si no militara en Movistar- tuvo otra oportunidad. Pero se volvieron a repetir los mismos errores. Liderazgos compartidos, cosas bonitas, búsquedas de podios dobles, y ahí quedó la última oportunidad de haber podido lograr el ansiado sueño amarillo por la puerta grande.

Su carrera ha proseguido con momentos más brillantes que otros, su imagen como icono colombiano ha llegado a extremos hilarantes, pero ese paso de prometedor héroe al villano del codo tuvo su inflexión en esas primeras carreras.

Escrito por el último Fan de Nairo Quintana. ¡Larga vida a Nairo Quintana!

Escrito por Jorge González Vives

Fotos: Sirotti

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