La única contrarreloj del recorrido llega tras el segundo y último día de descanso. Para muchos, este también lo será. Son apenas 22 kilómetros y el recorrido está bien lejos de ser para especialistas. Dos subidas realmente exigentes, sobre todo la segunda, la mítica Cota de Domancy en la que Hinault destrozó a sus rivales en el Mundial de 1980. Se esperan pocas diferencias y que la carrera enfile la última etapa de alta montaña.
