Patrick Lefevere y Eusebio Unzué son quintos; de 1955. Apenas 7 semanas más viejo el belga que el navarro. El próximo invierno, ambos cumplirán los 68 años. Con esa edad, la mayoría de las personas están pensando ya en jubilarse, si no lo han hecho ya. Sin entrar en mayores disquisiciones, ambos son de los managers más veteranos del ciclismo actual.
Lefevere y Unzué, hasta hace pocos años, comandaban dos de las escuadras dominadoras del pelotón internacional. Sin embargo, hoy en día, mientras la escuadra comandada por el belga permanece entre las mejores, no se puede decir lo mismo de la que patrocina Movistar. Y es que el equipo telefónico español se ha visto obligado a ganar puntos en las últimas carreras de la temporada para evitar el descenso. A últimos días de septiembre, casi se puede anunciar con seguridad que el equipo azul permanecerá la temporada 2023 en el World Tour.
Sin embargo, y pese a la alegría que supone esa permanencia, lo que los rectores de la empresa Movistar, y la dirección del equipo ciclista debieran comenzar a reflexionar, es por qué su equipo ha pasado de ser uno de los punteros del panorama ciclista internacional, a ser uno de los candidatos al descenso.
Para quien no lo sepa, aunque entre mis lectores habrá contados que no lo sepan ya, Abarca Sports es la sociedad mercantil que sirve de nexo de unión entre la estructura ciclista-deportiva y el patrocinador de turno de esa estructura.
La sociedad Abarca Sports se constituyó hace ya tiempo. En aquellos en los que todavía José Miguel Echávarri codirigía junto a Unzué el destino del entonces denominado “equipo navarro”. Junto a estos dos, también formaba parte del accionariado Juan García Barberena, consejero delegado en los años setenta y ochenta del pasado siglo de la empresa Inasa, fabricante en Irurzun del papel de aluminio Reynolds, y que ya falleció hace casi veinte años.

Desconocemos cómo estará repartido en este momento el accionariado de la empresa Abarca Sports. La que gestiona el día a día del equipo ciclista en este momento denominado como Movistar. No es difícil imaginar que Eusebio Unzué será el accionista mayoritario. Pero no ha trascendido públicamente si cuenta con más socios, y en qué porcentaje.
Sirvan todos estos antecedentes para contextualizar en qué situación se encuentra el equipo Movistar y la empresa Abarca Sports.
¿Y ahora qué?
La duda fundamental, por la que nadie aún le ha preguntado públicamente, es qué piensa hacer en el futuro Eusebio Unzué con su empresa. Hasta cuándo va a seguir personalmente con ella. Y cuando decida ya “jubilarse”, quién va a ser su sucesor como accionista mayoritario. Por supuesto, todo lo que escribamos a partir de aquí, no pasan de ser especulaciones.
Uno de los mejores posicionados es en este momento es Chente García Acosta. Navarro como todos los anteriores, representaría en este momento perfectamente los valores que siempre han identificado a Reynolds, a Banesto, a Caisse d’Epargne, a Movistar…Sería un signo claro de continuidad.
Pero, ¿es continuidad lo que necesita en este momento el equipo Movistar? ¿La continuidad que le ha llevado hasta esta situación de pelear por no descender? ¿O quizás lo que se necesite en el equipo Movistar es precisamente romper con esa continuidad? Que entre gente nueva, sin ataduras con modos de planteamiento pasados que supongan un lastre para posibles cambios. Personas que, partiendo de cero en esa estructura, puedan implantar su metodología sin temor a reproches de otras personas que, llevando muchos años en el equipo, pudieran llegar a pensar que tienen algo así como “derechos adquiridos”.
Buena parte de la afición española al ciclismo sigue viendo en Movistar la continuación de aquel equipo que, en las tardes de verano de los años noventa del siglo pasado, tantas jornadas de gloria les proporcionó. No creo que nos equivoquemos mucho en ello. Y a Movistar, como empresa y como marca, esa identificación le parece algo fenomenal. Algo con lo que no le interesa en absoluto romper.

Pero aunque a Movistar, como empresa, ese planteamiento de seguir centrándose en la Vuelta y en el Tour es lo ideal para ser fiel a su público mayoritario, puede que ya no sea suficiente para el equipo ciclista como conjunto. El ciclismo ha cambiado. Y aquellos planteamientos parece van quedando obsoletos. O que resultan insuficientes. Como demostración, lo sucedido este año.
El ciclismo ha cambiado mucho desde que, en los años setenta, Eusebio Unzué empezase a correr en el Nuevo Legarra. El propio Unzué lo sabe perfectamente. De primera mano. Los planteamientos con los que Unzué creció y con los que sus equipos obtuvieron tan sonados triunfos, cada vez sirven menos en este ciclismo tan transformado.
Unzué es el propietario de sus acciones. Podrá hacer lo que mejor le parezca, porque al fin y a la postre, ha sido él quien ha conseguido que Movistar sea lo que hoy es. Nadie se lo discute. Pero en agradecimiento al ciclismo, que tanto le ha dado a él, podría tener en consideración que Movistar es a hoy día el único equipo español del World Tour. Y que sería un gran detalle que permaneciese en él cuando Unzué decida desaparecer del escenario deportivo.
Escrito por: Raúl Ansó Arrobarren (@ranbarren)
Foto de portada: Photo Gomez Sport / Movistar Team
Bajo mi punto de vista, siempre con el máximo respeto y admiracion por lo que Abarca y sus gestores han conseguido en estos más de 40 años en el ciclismo, creo que ha quedado claro que necesitan como mínimo una reforma en casa, ya que los muebles se han quedado obsoletos.
Yo creo que Eusebio debe ser valiente y dar un paso al frente y esto es apartar de puestos de dirección y gestión a personas anticuadas, que no tienen más CV que haber sido ciclistas y militado en el equipo e incorporar gestores empresariales, porque los equipos actuales hay que gestionarlos como una empresa totalmente, buscando el máximo rendimiento de cada miembro.
Actualmente sin embargo el equipo Movistar masculino se gestiona como si fuese un grupo de amigos, que van a pasarselo bien a una marcha cicloturista, con personas en los puestos de gestión, sin ninguna experiencia en selección, formación y gestión de equipos de personas, ni mucho menos empresas.
Hasta donde yo veo, quizás el hijo de Eusebio, Sebastián Unzue puede ser sobre el papel el que puede liderar esta reforma-rehabilitacion del equipo. Incorporando sabía nueva que le ayuden en la gestión y dirección de la empresa-equipo. Sería un error que continúe con personas que no tienen la experiencia y bajage dirigiendo empresas, porque como se ha comprobado un buen albañil, no siempre sabe dirigir una gran empresa multinacional de construcciones, igual que un ciclista retirado no siempre sabe dirigir una empresa-equipo deportivo.
Saludos y felicidades y gracias a los miembros de HC por el buen trabajo cada día.
Estoy totalmente de acuerdo con la primera parte del comentario de ENA. Cuándo en ‘El día menos pensado’ oyes la charla en el autocar del equipo se te cae el alma a los pies, sobretodo oyendo luego a miembros de UAE, Jumbo u otros equipos informando de que tenían tácticas muy claras desde hacía días para una carrera concreta. Esto en el aspecte deportivo. En el empresarial, desde luego hay que trabajar con mucha más previsión y con métodos más actuales.
Desconozco cuál podría ser la persona o el equipo idóneos que cogieran el equipo pero es obvio que hace falta un cambio de rumbo.